Volver a
5 de Septiembre
¡Hola chicas!
¡Qué lujo volver a encontrarnos un mes más junto a Nosotras! Ya estamos en septiembre. Y pensaba… Septiembre es el mes de la primavera y, aunque parezca un poco meloso, me encanta pensar en estas etapas de cambios, de cierres y aperturas y, porqué no, de nuevos inicios. Cuando hablamos de este renacer también hablamos de nuestra salud mental y, fundamentalmente, la salud sexual.
Todas las personas, tengamos o no pareja, estamos atravesadas por la salud sexual. No importa si tuviste relaciones con 1 o 45 personas: la sexualidad femenina es parte de tu vida, aun sin haber tenido sexo. Y si bien hay un “Dia de la salud sexual”, su importancia trasciende a la fecha. Incluso hoy, año 2023, aunque es un tema que se está visibilizando más, sigue siendo tabú.
Sí, chicas, 2023 y ¡sigue siendo tabú hablar de sexualidad femenina! ¿saben por qué? porque se limita y se reduce toda la sexualidad únicamente a la función reproductiva. ¿O a alguna de Nosotras nos hablaron de placer? Hoy sabemos que la sexualidad femenina tiene una profunda raíz en nuestra identidad y en la construcción de quienes somos como mujeres.
La sexualidad conecta, como un hilo invisible, nuestras emociones, las relaciones que mantenemos con otras personas y por supuesto, la imagen que nosotras mismas vemos en el espejo. Al ser un tabú lo único que abunda es la desinformación y una gran confusión. Por eso es que la salud (física, mental, y sobre todo, sexual), no puede limitarse a la descripción biológica.
La definición utilizada por la OMS hace algunos años atrás era que la salud es la ausencia de enfermedad: una mirada totalmente reduccionista de la salud como lo biológico “sano”. Pero la salud no es solo física: también es emocional, psicológica, social y cultural, mucho más. Considero que ante la falta de Educación Sexual y Emocional aparecen estas miradas desinformadas y estigmatizantes.
Pensemos por ejemplo en un hombre que no tiene una buena erección. ¿Podemos decir que esa persona no tiene salud sexual solo porque tiene una disfunción eréctil? No, para nada. Esa persona puede besar, acariciar, cortejar, seducir, dar o recibir sexo oral, caricias o besos en todo su cuerpo, puede usar un juguete sexual, puede estimular sus sentidos con música o luces bajas.
Entonces: ¿un síntoma determina la salud sexual? Claro que no. Les doy un ejemplo diferente: ¿les pasó alguna vez no tener deseo sexual? Puede pasar, es una disfunción sexual muy frecuente, de las más habituales, sobre todo en Nosotras. ¿Y, acaso, eso significa que no tienen salud sexual? ¡En absoluto! pueden hacer un montón de otras cosas.
Quizás se estén preguntando, bueno, pero ¿yo qué puedo hacer para aportar mi granito de arena en la salud sexual? y es una muy buena pregunta, les cuento:
Detecten conversaciones donde prosperen los mitos, los tabúes y la desinformación sobre la sexualidad, y alienten a buscar información en fuentes confiables y seguras respecto al tema.
Investiguen al respecto, van a ayudar a muchas personas de sus círculos íntimos a tener una mejor calidad de vida sexual.
Aceptar y validar la diversidad es clave: no es necesario que sea una manifestación abierta (como ir a una marcha), pero si identifican que alguien de su entorno realiza comentarios homofóbicos, respondan con información desde la salud sexual y la aceptación de la diversidad de género y de orientación. De cada una de Nosotras depende formar una sociedad justa.
Trabajen día a día en su autoestima, la imagen corporal positiva ayuda a sentir una mejor calidad de vida sexual.
Pidan ayuda: no siempre se puede con todo, y los y las sexólogas estamos para ayudarlas a salir de estos mitos destructivos sobre la sexualidad femenina y de las creencias irracionales que limitan o imposibilitan el placer.
¿Qué piensan, chicas? ¿Cómo ven esta “primavera” para darle una nueva oportunidad a la visibilización de la salud sexual?
Abramos debate en los comentarios para saber cómo vivimos Nosotras los miedos, los tabúes y la horrible desinformación con la que hemos crecido en materia de sexualidad.
¡Nos reencontramos en la próxima nota!
Maru
Déjanos tus comentarios