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16 de Noviembre
¿Qué son las emociones? Antes de empezar a hablar sobre cómo controlar o manejar nuestra emociones negativas, debemos saber qué son estas para poder enfrentarlas de la manera correcta; para así evitar problemas psicológicos que nos pueden llevar a resultados no deseados que amenazan nuestro bienestar.
Es por ello, que nuestra salud mental es tan fundamental como la salud física, por lo que debería ser una prioridad protegerla y cuidarla. Entonces, las emociones son sistemas inteligentes de respuestas de nuestro cerebro que nos permiten reaccionar de forma apropiada y rápida a los acontecimientos de nuestro entorno.
¡No te vayas a aburrir! Imaginate que las emociones nos permiten actuar sin tener que pensar. Huir o atacar, quedarnos paralizados o defendernos son procesos que ejecuta nuestro cerebro sin que seamos conscientes de los complejos cambios que ocurren en nuestro cuerpo ¡ Nuestro cerebro es muy mágico!
Toda acción que realizamos ya sea física o mental, genera una emoción, en consecuencia, esas acciones van en función de cómo nos sentimos. Y a la misma vez la acciones que realizamos nos hacen sentir de una determinada manera; puesto que manejarlas es controlar esos impulsos que presentamos ante dicha situación. Pienso, que sería muy chévere saber responder adecuadamente ¿no crees?
¿Cómo podemos manejar nuestras emociones? Recuerda que reprimir las emociones o intentar ignorarlas no da buenos resultados a largo plazo, porque reaparecen con más fuerza y es más difícil de ignorarlas cada vez. Una forma de hacerlo es practicando el semáforo con nuestras emociones y actitudes ante una situación.
ROJO: Quiere decir, ¡detente! realiza un stop, toma un refresco, cuenta hasta diez, entre otros ejercicios que desactivan el estado de alarma en el que te que te encuentras.
AMARILLO: Relájate y piensa, aplica el concepto de pensar antes de actuar, entra en un proceso de pros y contras de la situación ¡eso te ayudará!
VERDE: Soluciona, después del análisis llega a una conclusión justa, correcta que aporte a la problemática, esto hace alinearnos al corazón sobre lo que sentimos y lo que piensa nuestra mente.
Otra alternativa y una forma más profunda es:
Elige las emociones que quieres controlar o gestionar.
Recurre a pensamientos que te provoquen esa emoción, hasta que la emoción te invada.
Escucha a tu cuerpo, céntrate en todo lo que sucede en ti, qué cambios notas en tu cuerpo, en tu mente, a que conducta o comportamiento te lleva, qué te aparece cuando te sientes así.
Recuerda situaciones en las que has actuado de una forma que no te gusta debido a esta emoción. Acéptalo y habrás dado el primer paso para cambiarlo. Piensa en qué tipo de persona eres cuando reaccionas dejándote llevar por emociones negativas y luego piensa cómo quieres ser.
Ya conoces la emoción, cómo actúa en ti y le estás restando poder. De ahora en adelante cuando sientas esa emoción recordarás lo que has aprendido y elegirás consciente o inconscientemente no dejarte llevar por ella.
Espero que te sirva mucho, recuerda que estas prácticas son muy saludables, pero si sientes que no tienes control de ellas, siempre es bueno pedir ayuda, y existen especialistas en la salud mental que te pueden acompañar.
Gracias por leer.
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