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8 de Febrero
Bailar es divertidísimo, libera endorfinas y nos mantiene activas. Lo mejor de todo es que lo único que necesitas es sentir la música en tu cuerpo y dejarte llevar para disfrutar de esta súper actividad.
¡Bailar es una actividad física que te va a encantar y te hará muy feliz! Se define como un conjunto de movimientos que realiza tu cuerpo, estimulado por los ritmos de la música.
La importancia de bailar va más allá que pasarla bien, porque además de hacerte feliz tiene muchos beneficios positivos para tu salud emocional, física y mental. Mientras lo practicas fortaleces tus músculos, mejoras tu postura, te ayuda a liberar el estrés, a prevenir la osteoporosis, estimular la memoria, la agilidad mental y lo mejor es que te permite hacer nuevos amigos y socializar.
Existen muchos tipos de bailes: individual, en pareja o en grupo, y puedes escoger entre ritmos clásicos, tropicales, urbanos o el que más te guste para que le des muchos beneficios a tu cuerpo.
Corazón fuerte: bailar es lo máximo para mejorar tu estado físico y quemar calorías, lo que te ayuda un montón para la pérdida de volumen en tu cuerpo y bajar de peso. Hacerlo de forma regular aumenta el ritmo cardíaco y mejora la capacidad pulmonar, es decir la respiración en tu cuerpo. Cuando bailas tu corazón se fortalece, y al adquirir este ejercicio aeróbico como un hábito diario, estas previniendo y evitando enfermedades cardiovasculares, lo que es muy importante para tu salud.
Memoria increíble: aprender rutinas de baile y diferentes pasos, ayuda a que tu habilidad de hacer varias cosas al mismo tiempo sea mayor, porque la liberación de hormonas como la dopamina, permite a tu cerebro aumentar la agudeza mental, y a que este atento y activo siempre.
Adiós kilitos de más: si eres de las que quiere mantenerse en forma, pero el gimnasio o los deportes te aburren, la respuesta está en bailar. Diferentes estudios han demostrado que en media hora de baile se pueden quemar entre 200 y 400 calorías. ¡Wow! Un motivo más para sentirnos súper enérgicas y bailar sin parar, y a la vez bajar de peso.
Mucha flexibilidad: al bailar estimulas muchos músculos porque las coreografías y los diferentes estilos de baile, requieren de movimientos repetitivos que con el tiempo hacen que tus destrezas y habilidades, aumenten los niveles de flexibilidad, fuerza y resistencia.
Adiós estrés: cuando bailamos nuestro cerebro estimula la producción de endorfinas, una de las hormonas de la felicidad, que se encarga de liberar el estrés. Es decir que mientras bailas, tu cuerpo se divierte y a la vez logras despejar los problemas de tu mente.
Huesos más fuertes: con lo años a nosotras se nos van debilitando los huesos, lo que aumenta la probabilidad de que se quiebren o fracturen con facilidad. Al bailar, esta actividad de fuerza ayuda a prevenir la pérdida de la masa ósea.
Colesterol bueno: bailar además de ser divertido, es una hábito saludable para ti y tu cuerpo, porque cuando practicas el baile como una actividad aeróbica, se reduce en la sangre la producción del colesterol malo y se empiezan a incrementar los niveles de colesterol bueno.
Por estas y por muchas razones más no te quedes quieta. Diviértete, relájate, mantente activa y sé feliz al mismo tiempo. Baila o inscríbite a una clase de baile, seguro te sentirás más tranquila y podrás enfrentarte a cualquier situación, y recuerda que es una actividad para personas de cualquier edad.
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